Atlazul presentó los resultados finales para el impulso de la alianza litoral atlántica hacia el crecimiento azul

El Espacio Exploraterra de Sevilla acogió la jornada de clausura del proyecto Atlazul. Sin duda, un lugar único y excepcional para recordar la historia de las expediciones marítimas. Con ese espíritu de exploración y el legado de un navío que en su día fue el más avanzado de su tiempo, y que fue ejemplo de innovación, se celebró con éxito y satisfacción el cierre del proyecto Atlazul.

Este espacio histórico, la milla náutica cero desde la que partieron las naves que dieron la primera vuelta al mundo, fue escogido por su simbolismo y como homenaje, como señaló el consejero de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul, Ramón Fernández-Pacheco. Durante la inauguración destacó que “la Economía Azul es uno de los grandes retos” a los que hay que enfrentarse en los próximos años. “Atlazul es un éxito de por sí, porque ha abierto nuestro campo de visión para tener una concepción más rica de la Economía Azul en el contexto de la Península Ibérica”.

En sus diferentes intervenciones los ponentes pusieron en valor este programa europeo que ha cumplido con su propósito, contribuir al desarrollo e impulso de una alianza para que Andalucía sea líder de la Economía Azul en el sur de Europa.

El presidente del Clúster Marítimo-Marino de Andalucía, Javier Noriega, destacó la importancia de “volver la mirada al mar” como un horizonte de oportunidades, siguiente un modelo sostenible, inteligente e integrador.
El coordinador general del Campus de Excelencia Internacional del Mar, Darío Bernal, felicitó a la organización por el trabajo colaborativo de los dieciocho socios hispano-portugueses. “Invertir en Economía Azul, ahora es el momento”, expresó.

Rocio Reinoso, consejera técnica de la Secretaría General de Acción Exterior, indicó que “este proyecto de cooperación interfronteriza culmina con la Alianza Marítima Atlántica”, y precisó la importancia para el empleo de la formación dual, así como defendió la presencia de la mujer en el sector del mar.

En definitiva, todos los asistentes y representantes de las diferentes organizaciones implicadas, mostraron su apoyo a una segunda edición del proyecto, dado que “el trabajo iniciado en cooperación transfronteriza aún puede dar muchos frutos». Y esto es solo comienzo de un camino con objetivos comunes y el fin de hacer de “nuestra zona litoral una zona con futuro”.

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